Conoce los secretos detrás de estas 3 artes marciales y grita “¡KIIIIAAAA!” como Daniel-San
¿Quién no ha soñado con dar patadas voladoras como el mismísimo Jet Li? Involucrarse en una compleja y emocionante batalla contra los enemigos más feroces y “defender nuestro honor”. En pocas palabras, todos hemos fantaseado con ser verdaderos maestros de las artes marciales y vernos tan geniales como en las películas. No solo porque nos gusten los filmes de acción, sino por la intrigante sensación que nos causa ver a una persona defenderse con la fuerza de su propio cuerpo.
Si tú también admiras las artes marciales, la defensa personal y sobre todo, el poder que le brinda el deporte a tu cuerpo, por qué no repasamos algunas de las disciplinas más interesantes. Aquí encontrarás una lista con nuestras favoritas, tal vez incluso descubras alguna nueva:
Karate
Si tú también creciste admirando al Señor Miyagi y soñabas con derrotar a tus rivales como Daniel-San, es probable que seas un fanático del Karate o Karate-Do, o al menos lo conozcas un poco. Se trata de un arte marcial proveniente de Japón, en específico Okinawa. Está ligeramente influenciado por otros estilos de defensa chinos, y se distingue por sus movimientos de brazos, como golpes de puño, golpes de mano abierta y bloqueos. De igual forma, se involucran patadas, barridos y golpes a puntos nerviosos. ¡Su repertorio de técnicas es impresionante!
Hapkido
Aquí viene uno que muy pocos conocen, pero no por eso es menos interesante. Este arte marcial es de origen coreano, se distingue por su dinamismo e impresionantes movimientos. El Hapkido involucra en su mayoría: patadas complejas, llaves y pelea con armas, originalmente se utilizaba como un sistema militar. Su objetivo principal es la defensa personal usando la fuerza del adversario para contraatacar y protegerse de manera efectiva. ¡Sin duda una práctica que involucra todo el cuerpo!
Wing Chun
Con una interesante historia, este particular arte marcial proveniente de China y fue desarrollado por una sacerdotisa llamada Ng Mui. A diferencia de las disciplinas antes mencionadas, lo inquietante de este es que involucra la meditación, el auto conocimiento corporal, la sensibilidad y la relajación ¿No es curioso? Usualmente, el combate sucede a media y corta distancia, estando frente a frente del contrincante. El Wing Chu utiliza la defensa como método de ataque, en el que se neutralizan o desvían los golpes del oponente para contrarrestarlo y vencerlo.
Parece ser que cada arte marcial tiene su propia filosofía y cultura detrás. Lo curioso es que todas concuerdan en tratarse de prácticas para fomentar la paz interior y evitar los confrontamientos violentos. No por nada se conocen como: defensa personal.
Ahora cuéntanos tú, ¿cuál te pareció la más interesante? ¿Te animarías a aprender una de estas maravillosas disciplinas marciales? ¡Nunca es tarde para aprender! Quizás hasta encuentres una academia cerca de tu colonia para que comiences a convertirte en todo un Bruce Lee. Deja de hacer siempre lo mismo. Lerk, tu aliado en el placer.
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