Historias de Navidad: Experiencias en el hospital

Las películas navideñas clásicas son conmovedoras y festivas, pero definitivamente no hay nada más emocionante que la realidad misma. Existen momentos mágicos dentro la vida cotidiana si ponemos la suficiente atención para encontrarlos. Por ello, aquí tenemos 3 relatos de hospitales que te harán descubrir el verdadero significado de la navidad: 

 

“Creo que mi historia favorita tiene que ser la de la primera vez que pasé el turno nocturno durante  Nochebuena. Justo al inicio de mi turno, llegó un señor corriendo con un trapo envuelto en la mano. Pasó directo a emergencias porque se había cortado preparando la cena de navidad. Lo tuvimos que coser y recibió 3 puntos en el dedo, lo cual es mucho considerando el tamaño.

 

Era un señor divorciado y era la primera vez que preparaba la cena él solo. Me recordó mucho a mi papá que era muy malo para cocinar, o más bien, todo lo que involucrara hacer cosas solo. 

 

Estaba muy emocionado de pasar esa noche con sus hijos y preparar la visita de Santa Claus. Me dio mucha ternura la verdad, hablaba mucho de sus dos hijos. Al final mi compañera le dio unas instrucciones y dijo que seguramente tendría que comprar algo ya preparado. Cuando se fue con sus hijos, ellos se veían muy contentos aunque tuvieron que pasar un rato en el hospital, creo que pensaron que fue emocionante.” (42 años, Médico Cirujano)

 

 

En el caso de la siguiente historia, no ocurrió exactamente en un hospital, pero sí le pasó a una dedicada enferma. Este relato tan conmovedor no podía quedarse sin ser contado. Seguramente te sacará una lágrima, así que prepara unos pañuelos.

 

“En una navidad como enfermera de una señora mayor, cené en mi casa, pero regresé a pasar la noche con ella para cuidarla. La cuidé toda la noche del 24 y el 25 de diciembre. Sus hijos le llamaron la mañana de Navidad, pero dijeron que no podían pasar a saludarla porque los nietos estaban jugando con sus regalos de Santa. 

 

Yo sentí muy feo, porque por trabajo tenía que dejar a mi mamá en navidad, pero si tuviera opción, me hubiera quedado a acompañarla. ¡Y eso que estaba mi hermana en mi casa con ella! La señora estaba muy triste, y no quería ni comer. 

 

Le conté a mi mamá y poco tiempo después llegó con unas tortas de recalentado a la casa de la señora. Llevó hasta el ponche que habíamos tomado en la cena, mi hermana también llegó con su hijo. ¡La señora se puso muy feliz! 

 

Se quedaron toda la tarde platicando hasta que mi familia regresó a la casa y yo me quedé con la señora. Al final me dijo que estaba muy contenta que había pasado navidad en familia aunque no fuera la suya, yo le dije que podía ser parte de la mía también porque nosotros siempre hacemos un cachito para todos.” (33 años, Enfermera)

 

Ya discutimos sobre la realidad maravillosa que presenciamos en nuestra vida diaria. Por ello, la siguiente historia es un ejemplo perfecto de aquellos momentos de película que ocurren y no podemos dejar pasar desapercibidos. 

 

“No todos pueden decir que platicaron con Santa Claus en navidad. A mí me tocó atenderlo justamente el 24 de diciembre. Algo que parecía haber salido directo de la película “Santa Cláusula” que hasta la fecha es mi mejor anécdota navideña. 

 

 

Resulta que un señor estaba trabajando de Santa Claus en Nochebuena, iba a sorprender a las hijas de una familia en un acto que repite varias veces durante la noche del 24. Lo que nadie le dijo fue que terminaría en el hospital. Este hombre actuaba de Santa Claus en diferentes casas para sorprender a los niños, pero en la última que había ido se resbaló y terminó por torcerse el brazo, no estaba rotó, pero sí tenía mucho dolor. 

Mientras lo atendíamos, nos contó sobre por qué le gustaba mucho trabajar de Santa en  Nochebuena independientemente del interés económico, le encantaba ver a los niños chiquitos felices y emocionados, ya que él tenía hijos mayores que ya no creían en Santa. Le hacía ilusión recordar esa época de su vida. Al final todos nos tomamos una foto con él ¡Claro! Yo tengo pruebas de que una navidad me tocó atender al mismísimo Santa Claus.” (38 años, Médico Cirujano) 

 

¿Qué te parecieron estas historias? ¿Ya sientes el verdadero espíritu navideño? Recuerda que durante esta conmovedora época del año, si hay algo que resulta claro saber, es que definitivamente lo más importante es pasar tiempo con nuestros seres queridos. De parte de Lerk te deseamos feliz navidad y un próspero año nuevo repleto de éxito, tranquilidad y sobre todo, experiencias placenteras. El placer de escuchar consiste en hacerlo para entender, no para contestar. Lerk, tu aliado en el placer.

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